Cuando los peques acuden al dentista, muchos van con miedo. Y, aunque en la mayoría de los casos es infundado, el miedo hace que lo pasen mal y que, el dentista no pueda hacer bien su trabajo.
Para este artículo hemos contactado con clínicas dentales en Barcelona, desde donde nos dan algunos interesantes consejos:
- Los pequeños copian el comportamiento de los mayores. Así, si ve que su madre, padre o hermanos hablan con miedo del dentista, se ponen nerviosos, comentan que es doloroso… al final, los pequeños lo reproducirán también
- En una vez en el dentista, lo ideal es distraerlos. Preguntarles por el nombre, su juego favorito o qué serie de dibujitos es su favorita hará que se distraiga
- Es importante que el dentista le explique al pequeño qué le va a hacer. No hay que usar lenguaje técnico y se adaptará la información al entendimiento del pequeño.
- Los padres deben llevar a su hijo al dentista desde pequeños, pues así se familiarizarán con esta figura desde chicos. Además, entrarán solos en la consulta, pues en presencia de los padres suelen tener un peor comportamiento
